La exclusiva forma curva de la entrada y la salida de aire ofrece una mayor superficie de apertura y menos resistencia al flujo de aire en comparación con los filtros tradicionales en forma de V: Área de apertura más grande: Un 30 % más de entrada y un 60 % más de salida son componentes esenciales para lograr el mayor flujo de aire.

Una estructura de fibras finas y la exclusiva relación entre la altura y la separación de los pliegues trabajan conjuntamente con la entrada y la salida en forma radial para minimizar la resistencia y maximizar el flujo de aire. Los separadores de pliegues garantizan la estabilidad y proporcionan un rendimiento continuo y un bajo consumo de energía.

Diseño avanzado del filtro que integra un pre-filtro, eliminando el bloqueo del flujo de aire y la fuerte caída de presión en comparación con un pre-filtro armado directamente en la superficie del filtro.

Los filtros antipatógenos cuentan con un marco inyectado continuo y con una junta de estanqueidad para evitar la entrada de aire y la contaminación.

Los filtros antipatógenos se pueden ensamblar en diferentes configuraciones para adaptarse a diferentes sistemas de ventilación, tales como: presión neutra, positiva, negativa o cruzada.